Google ya es la segunda compañía tecnológica más valorada

Google ya es la segunda compañía tecnológica más valorada:
El valor de Google en Bolsa ha sobrepasado al de Microsoft, convirtiendo al gigante de Internet en la segunda compañía tecnológica en capitalización, por detrás de Apple que está a una enorme distancia en estos momentos. Este hecho es sólo una anécdota estadística de cómo los ingresos por la Red y los móviles están superando al negocio de los ordenadores, donde los de Redmond conservan la supremacía.
Al cierre del lunes en la Bolsa de Estados Unidos, las acciones de Google marcaban los 761,78 dólares, con lo que la capitalización total de la compañía queda en 249.900 millones de dólares. El balance fue un incremento del 1% en el valor de los títulos, el mismo porcentaje que descendieron los de su rival.
Google supera así el valor en Bolsa de Microsoft, que hasta ahora era la segunda compañía tecnológica más valiosa. Sus acciones cerraron a 29,49 dólares, al caer un 1%, dejando la capitalización del gigante de Redmond en 247.200 millones de dólares.
Este adelanto es un detalle simbólico, reflejo de cómo el beneficio en el mercado tecnológico ha pasado de los ordenadores a Internet y a los dispositivos móviles. En 2010 Apple superó a Microsoft y ahora Google lo ha pasado también. Pese a todo lo que está ocurriendo los de Redmond siguen obteniendo una gran parte de sus ingresos de Windows y Office, según recoge Bloomberg.

Apple, a mucha distancia

Por el momento Apple sigue siendo la compañía más valorada, no sólo entre las tecnológicas, sino entre todas las que cotizan en Bolsa. Se ha distanciado tanto del resto de empresas que su posición parece inabordable por ahora. Incluso se ha llegado a especular que para el próximo año sus acciones llegarán a valer 1.000 dólares, cuando actualmente están en 659,39 dólares.
En febrero de este año el valor de Apple superó al de Google y Microsoft juntas. En estos meses la distancia entre estas dos cifras no ha hecho sino aumentar. De hecho en agosto se anunció que la firma de Cupertino había rebasado todos los récords, alcanzando la capitalización más alta de la historia para una empresa que cotiza en Bolsa, aunque los datos no tenían en cuenta la inflación.